El cliente de ALIANDO es conocido por su solidez en materia de suscripción, otorgamiento de préstamos y administración de carteras. Pero la complejidad de sus operaciones creció a la par de la empresa: los procesos de suscripción manual generaban cuellos de botella, los flujos de trabajo de cumplimiento eran lentos y fragmentados, y los datos residían en silos, lo que dificultaba la colaboración entre departamentos.
Al operar en un entorno altamente regulado y con un uso intenso de datos, la empresa financiera necesitaba procesar grandes volúmenes de información financiera de forma rápida y precisa para que sus suscriptores analizaran documentos complejos y evaluaran el riesgo. Además, los equipos de cumplimiento dedicaban demasiado tiempo a las comprobaciones de rutina y a la preparación de auditorías, y sus líderes requerían información en tiempo real para administrar las carteras y prever el rendimiento.
Con los sistemas heredados de la empresa, las tareas manuales consumían un tiempo valioso y limitaban la capacidad de escalar. El cliente de ALIANDO necesitaba una estrategia de datos unificada para innovar al ritmo que exigía el mercado.